La Discopatía Degenerativa también conocida como Enfermedad Degenerativa Discal (EDD), ocurre en los discos intervertebrales ocasionando un proceso de desgaste en ellos que les hace perder altura e hidratación, esta enfermedad puede estar presente en cualquier área de la columna vertebral (cervical, dorsal y lumbar), causando dolor y limitación para realizar las actividades de la vida diaria.

Los discos intervertebral son unas almohadillas cartilaginosas que se encuentran entre las vértebras y actúan como amortiguador en la columna permitiendo los movimientos que esta realiza, también brindan soporte y protección a las vértebras.

Están compuestos por dos estructuras, la parte central que se denomina núcleo pulposo, y el anillo fibroso, el cual se encarga de proteger al núcleo.

Causas de la Discopatía Degenerativa

Es parte del proceso de envejecimiento, pero existen una serie de causas que pueden acelerarlo  y hacer que una persona relativamente joven presente una degeneración discal avanzada. A continuación se mencionan las causas más comunes;

  • Actividad laboral
  • Realizar actividades repetitivas que requieran del levantamiento de pesos, adoptando malas posturas.
  • Estar sentado por períodos prolongados, no usar una silla ergonómica adecuada ni el escritorio acorde; produce posturas inadecuadas ocasionando daños en la columna vertebral.
  • La exposición a una vibración continuada (típicamente el martillo neumático).
  • Falta del ejercicio físico: provoca debilidad de la musculatura erectora del tronco y de la pared abdominal y con ello mayor sobrecarga de peso sobre la columna vertebral.
  • Traumatismos: los accidentes de tráfico, laborales o por caídas casuales, provocan la degeneración del disco.
  • Obesidad: el sobrepeso provoca desgaste acelerado de los discos intervertebrales.
  • Predisposición genética: algunas familias presentan degeneración discal precozmente.
  • Tabaco: el monóxido de carbono del tabaco daña el metabolismo del disco intervertebral. El daño es proporcional al número de cigarrillos que se fuman al día.

Síntomas  de la Discopatía Degenerativa

La degeneración discal no siempre provoca dolor. El dolor discogénico suele ser dolor lumbar o cervical, de acuerdo al nivel donde esté presente la degeneración.

Si la degeneración discal provoca compresión radicular puede haber dolor en las extremidades.

  • Dolor persistente a severo e incapacitante.
  • Períodos de dolor severo intermitentes, que va de unos cuantos días a unos cuantos meses.
  • Adormecimiento y hormigueo de las extremidades.

Diagnóstico de la Discopatía Degenerativa

Para diagnosticar este tipo de lesión es necesario iniciar con un examen físico, con especial atención en el cuello, la espalda y las extremidades.

El médico  examinará la espalda para ver la flexibilidad, el rango de movimiento y la presencia de ciertos signos que indiquen que las raíces nerviosas están afectadas por cambios degenerativos en la columna. A menudo, esto incluye revisar la fuerza de los músculos y los reflejos para verificar que todavía funcionan normalmente.

Realizar una radiografía o una resonancia magnética es de gran utilidad para complementar el diagnóstico.

Opciones de tratamiento para la Discopatía Degenerativa

Todos los especialistas coinciden en que controlar el dolor, independientemente del origen, precisa de ejercicio para aumentar la fuerza y  flexibilidad de los músculos que rodean y soportan la espina dorsal. El ejercicio incrementa el flujo sanguíneo a la espalda, lo cual aporta oxígeno y nutrientes a las articulaciones y los músculos, mientras elimina destructivos productos inflamatorios de desecho.

Las opciones de tratamiento que junto con el ejercicio fomentan la fortaleza de la espalda son:

  • Tratamiento Fisioterapéutico, se basa en la colocación de agentes físicos acorde a los síntomas que refiera cada paciente, así como también el terapeuta se encargará de indicar los ejercicios adecuados para disminuir el dolor, mejorar los rangos articulares y aumentar la fuerza muscular.
  • Medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE)
  • Cirugía, como la de reemplazo con implantes o fusión de la espina.

Recomendaciones

  • Además de las indicaciones médicas, se debe realizar la cantidad adecuada de actividad física y fortalecer los músculos que soportan la columna,
  • Mejorar  su estilo de vida, como alimentarse con una dieta nutritiva, dejar el tabaco, y atender los efectos físico y emocional.
  • Tratar de mantener una postura adecuada a la hora de realizar cualquier actividad, bien sea en el trabajo u hogar.